Economía circular: reformular el crecimiento para beneficiar a toda la sociedad

Economía circular: reformular el crecimiento para beneficiar a toda la sociedad

La matriz económica basada en el sistema lineal de “extraer, producir y desperdiciar”, está llegando al límite de su capacidad física. Una nueva corriente apoyada en la circularidad de los sistemas biológicos puede aportar capital económico, natural y social a la comunidad.

El concepto de la economía circular, basado en fundamentos como la retroalimentación y los sistemas pensados como “ciclos”, remarca la importancia del funcionamiento de la economía en todos los niveles -empresas, organizaciones e individuos que actúan a nivel local y global-.

Este modelo promueve el aprovechamiento de recursos y la reducción del consumo innecesario. Sostenida por una transición hacia el uso de fuentes de energía renovables, la economía circular crea capital económico, natural y social, basado en tres preceptos:

  • Desecho de residuos y contaminación desde la etapa de diseño.
  • Conservar productos y materiales en uso.
  • Regenerar sistemas naturales.

La economía circular hace una distinción entre ciclos biológicos y técnicos. El consumo se da únicamente en los ciclos biológicos: los alimentos y distintos materiales de base biológica (derivadas de plantas, árboles, algas, organismos marinos, microorganismos, etc) retornan al sistema mediante procesos de compostaje y digestión anaerobia (generación de biogás). Este ciclo regenera sistemas vivos, como la tierra, que ofrece recursos renovables para la economía.

El ciclo técnico permite recuperar productos, componentes y materiales por medio de la reutilización, reparación, remanufactura o reciclado.

Entre los principales beneficios de la economía circular, se puede ver que:

  • Favorece la innovación en materia tecnológica.
  • Fomenta la aparición de nuevos modelos de negocio/servicios.
  • Permite el ahorro en costos de materia prima.
  • Genera nuevas oportunidades de empleo.
  • Reduce el consumo de recursos.
  • Induce a una mayor competitividad/sostenibilidad.
  • Eleva la productividad/eficiencia.
  • Aporta a la creación de valor.

En cuanto a los beneficios ambientales:

  • Reducción en la contaminación global.
  • Disminuye la generación de residuos.
  • Reduce el impacto ambiental provocado por los procesos de extracción de materia prima.
  • Incremento del valor de la tierra y del suelo como activos.

La economía circular recurre al uso de las tres “R”: reducción, reutilización y reciclado. Teniendo en cuenta que ya no es suficiente reciclar para enfrentar los nuevos desafíos medioambientales, este modelo evita el derroche de los recursos naturales, a través de una redefinición de nuestros hábitos de consumo

Para ayudar podemos:

  • Primero reparar, después descartar: si bien hoy los productos tecnológicos quedan obsoletos rápidamente, desechar debe ser la última opción. Si no hay opción llevar tu dispositivo a un punto “verde” para su descarte final.
  • Utilizar menos elementos desechables: usar servilletas o pañuelos de tela en lugar de papel tissue o cajas/bolsas de tela en reemplazo de las bolsas de plástico. Reemplazar el uso de documentación impresa (DNI, registro de conductor, pólizas de seguro) por sus versiones en formato digital.
  • Reciclar: la economía circular promueve una segunda vida útil de los desechos como nuevos productos primarios. Los envases de plástico, cartón, papel, latas y vidrio tienen su lugar específico en los contenedores. Pero también hay que prestar atención a las pilas, químicos, textiles, aceites usados o medicamentos al momento de su reciclado.
  • Ajustar el consumo de energía: comprar electrodomésticos de alta calificación energética, o poseer un buen aislamiento del frío/calor para la vivienda son acciones que permiten ahorrar. La ecomovilidad también brinda un aporte sustancial a un menor consumo de combustibles fósiles. Asimismo el manejo responsable y el cuidado de nuestro vehículo colabora en tal sentido.
  • Comprar de segunda mano: las aplicaciones y plataformas digitales han favorecido el mercado de segunda mano. Allí podés conseguir el producto que necesitás a precios justos y en buen estado.

Nuestro hábitat requiere de acciones sostenidas en el tiempo, tanto de las organizaciones como de las personas, con el fin de brindar un futuro viable a las nuevas generaciones.

Adoptar costumbres saludables para con el medio ambiente, por más pequeñas que sean, pueden ser vitales para lograr ese objetivo.

DESDE FEDERACIÓN PATRONAL, MANTENEMOS FIRME EL COMPROMISO EN EL CUIDADO DE NUESTRO PLANETA.

#SiempreJuntoAVos